Los distintos trabajos publicados en INFOJUS NOTICIAS hasta el 9/12/2015 expresan la opinión de sus autores y/o en su caso la de los responsables de INFOJUS NOTICIAS hasta esa fecha. Por ello, el contenido de dichas publicaciones es de exclusiva responsabilidad de aquellos, y no refleja necesariamente la posición de las actuales autoridades del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos respecto de los temas abordados en tales trabajos.

Infojus Noticias

24-3-2015|18:12|24M Nacionales
Etiquetas:

“El silencio es el enemigo de la verdad”

La titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, fue una de las referentes de derechos humanos que leyó el documento en el acto para conmemorar el 39 aniversario del Golpe de Estado. En una plaza colmada, decenas de miles de personas se reunieron para seguir pidiendo Memoria, Verdad y Justicia. Así se está viviendo este 24 de marzo.

  • Santiago Cichero Fotos: Leo Vaca, Sol Vazquez, Santiago Cichero
Por: Infojus Noticias

Pasadas las cinco de la tarde, en una Plaza de Mayo repleta, representantes de derechos humanos leyeron un documento en la marcha que conmemora el 39 aniversario del Golpe de Estado. Las agrupaciones Familiares, H.I.J.O.S, Madres de Plaza de Mayo y Abuelas de Plaza de Mayo celebraron las políticas de los últimos años y denunciaron las demoras en los juicios por la responsabilidad empresarial en la dictadura. La presidenta de Abuelas, Estela de Carlotto, recordó: “El pasado está acá, en cada joven que tiene su verdadera identidad. Estamos desarmando parte del plan sistemático de robo de bebés. Nunca lograron que retrocediéramos ni un paso, ni cuando nos perseguían ni cuando nos amenazaban. Para nosotras, las Abuelas, el silencio es el enemigo de la verdad. Por eso exigimos que se rompan los pactos de silencio que nos impiden encontrar a nuestros nietos. Ya son 116 las historias que pudimos encontrar”.

A las 16hs, decenas de miles de personas ya estaban agrupadas en el epicentro de la marcha. Tanto es así que la columna principal encabezada por Madres de Plaza de Mayo y otros organismos de derechos humanos tuvo que entrar por la calle Irigoyen. Las banderas de las distintas agrupaciones políticas conviven en el aire con las siluetas que representan a los desaparecidos. Cada silueta es un nombre, cada nombre dice: “pido castigo”.

Inés tiene 75 años y lleva en la solapa un prendedor con un dibujo de la presidenta Cristina Fernández descolgando un cuadro de Magnetto, emulando lo que hizo Néstor Kirchner con el cuadro de Videla. “Cuando compré este prendedor había una nena de seis años con su papá eligiendo uno para ella: eligió el del pañuelo blanco. Eso me emocionó. Y pienso que es por programas infantiles como Paka Paka que buscan generar una conciencia histórica”, dijo Inés a Infojus Noticias. Carlos, un hombre que estaba a su lado, se sumó y dijo: “Esto forma parte de las políticas de derechos humanos de los últimos doce años. En los ’90 la Plaza era sólo de los militantes, ahora es de todos y esta multitud es la prueba”.

Horas antes, a metros de la Casa Rosada, sobre la calle Balcarce, la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, dio entrevistas a la prensa. Ana la miraba desde atrás de la valla, con la esperanza de sacarse una foto con ella: "Tengo 61 años, es la primera vez que traigo a mi sobrina", contó a Infojus Noticias. Dice que es un día histórico porque es el primer 24 de marzo que Estela tiene a su nieto Ignacio Montoya Carlotto, y se le empañan los ojos.

La presidenta de Abuelas respondió sobre el encuentro con Ignacio: "Es igual porque él siempre estuvo en mi corazón, pero este año tengo la alegría enorme de saber que está haciendo lo mismo en su ciudad (Olavarría)".

El Che,  Evita, Néstor Kirchner y Julio López están presentes en las remeras de los cientos de personas que ya llegaron a la Plaza.  “MEMORIA” puede leerse en el pecho de siete chicos y chicas que juntos forman la palabra abrazados en plena Avenida de Mayo. En el pecho de Pablo, que con seis años va de la mano de su papá, su remera anuncia: “Yo me pongo la camiseta del juicio y castigo”.  

Un globo blanco con la inscripción “30 mil desaparecidos presentes” flota en medio de la multitud. Lo lleva Ariel que va con su mamá. “Desde chiquito me acompaña”, dice a Infojus Noticias una mujer la mujer sonriente.

Muñecos gigantes representan la complicidad civil en el genocidio: son Ledesma, Clarín y la Justicia. Están manchados de sangre y rodeados de buitres. Eso se queda mirando la Madre de Plaza de Mayo Delia Morel, que se tomó el 116 para llegar a la Plaza, con el recuerdo de su hermana Fidela y de su cuñado Alberto Horacio García, secuestrados el 29 de julio de 1976 y desaparecidos desde entonces. Cuando bajó en avenida de Mayo se puso el pañuelo blanco y al cuello y se colgó el cartel dónde lleva estampado sus rostros, sus nombres y la fecha en la que desaparecieron. Se le hizo difícil caminar: "Por el reuma que me quedó del frío en las primeras marchas", contó a Infojus Noticias.

  

Abrazos de Madres

Delia había quedado en encontrarse con otras dos Madres, sus amigas, en la esquina de Avenida de Mayo y Piedras para  almorzar juntas antes de marchar. Mientras caminaba, muchas personas se le acercaron a pedir fotos. Ella sigue adelante y recuerda para Infojus Noticias: “Fidela era la más chica. A Fidela "Chela" y a Alberto los sacaron de mi casa porque acompañaban al padre Mugica  en las villas. Un vecino escuchó a Chela gritando y es lo último que supimos de ellos". Delia siempre los buscó, estuvo en las primeras reuniones que las Madres hicieron en las afueras de La Plata, en el Parque Pereyra Iraola. "A mis padres no les dijimos porque eran grandes y no queríamos que se fueran antes de tiempo; igual se fueron tristes y sin saber la verdad", dijo Delia con los ojos llenos de lágrimas.

Cuando se acercó a la pizzería donde se iba a encontrar con sus comadres, Delia se fundió en un abrazo con otras dos mujeres que, como ella,  llevaban sus pañuelos en la cabeza. “Siempre nos encontramos acá”, dice y encabeza se encaminan para encabezar la bandera junto a los nietos recuperados Horacio Pietragalla y Victoria Montenegro.

"Estas mujeres tienen 80 y 90 años y nos siguen marcando el camino", dijo Montenegro a Infojus Noticias sosteniendo junto a las Madres la bandera azul donde están estampados los rostros de miles de hombres y mujeres secuestrados y desaparecidos. Su primera marcha del 24 de marzo fue en 2004 y la hizo con Abuelas de Plaza de Mayo, gracias a quienes recuperó su identidad. Ese día, Montenegro buscó el rostro de su padre en la bandera: "Las fotos  eran de papel y estaban pegadas en la tela; lo encontré y fue muy emocionante". Desde entonces marcha "convencida de que este es el camino a seguir para cumplir los sueños de estos compañeros".

 
 

MB/JC/AF

Relacionadas