Infojus Noticias

Agrupaciones defensoras de la diversidad sexual se reunieron en las puertas de un local en Rosario y se besaron en repudio a la discriminación que sufrieron dos jóvenes la semana pasada.

-¿De qué te reís tanto?, ¿te gusto?

-Me río porque es normal ver a un hombre y a una mujer de la mano, pero no a dos hombres, puto de mierda.

Matías Bermúdez (26) y Gonzalo Braganza (25) fueron de la mano al supermercado rosarino La Gallega y tuvieron ese diálogo con el encargado de seguridad del local. Lo denunciaron en la comisaría 2 y en el Instituto Nacional Contra la Discriminación y el Racismo (INADI).

“Él tiene una onda patova mala onda. Cuando empezó a gritar a la gente misma que estaba en el lugar les llamó la atención porque pensábamos que iba a pegar. Vino la policía y no hicimos la denuncia en el momento porque íbamos a quedar demorados todos y teníamos que ir a trabajar. Hicimos un acta y un folio. Y lo denunciamos al INADI”, dijo Bermúdez a Infojus Noticias.

Siempre que iban a comprar se les reía. “Sigue trabajando ahí como si nada y nosotros seguimos yendo porque es el negocio al que vamos siempre. Nos mira fijo. Y el otro día como un psicópata vino a pedir disculpas, aunque después de la catarata de insultos que nos dijo es difícil de aceptarlas”, dijo Bermúdez

Bermúdez y Braganza son pareja desde hace siete años, nacieron en Mar del Plata y en 2012 se mudaron a Rosario. Bermúdez estudia profesorado de Historia y Braganza está terminando el secundario. Tienen un trabajo por la tarde y otro por la noche y piensan casarse en febrero.

“Mientras no exista una ley de educación sexual que se ponga en marcha van a ocurrir este tipo de cosas. Porque acá lo que se trata es un cambio cultural, y este gobierno provincial que se llama progresista hace años que viene ninguneando la puesta en marcha de la ley de educación sexual”, dijo a Télam el titular de la asociación Vox, Guillermo Lovagnini.

Rosario es la única ciudad de Argentina que tiene una ordenanza antidiscriminatoria incluida en el Código de Faltas. “En este caso si bien es un empleado del supermercado, según dicen los chicos porque tenía una pechera que lo identificaba con el lugar, es muy probable que el hombre pertenezca a una empresa de seguridad tercerizada. Igual la responsabilidad última es del local”, dijo a este portal Esteban Paulón, presidente de la Federación Argentina de Gays, Lesbianas, Bisexuales y Transexuales de Argentina (FALGBT).

Protestar a los besos

A mediados de diciembre de 2014 se hizo un besazo en un local de hamburguesas, convocado por la Secretaría de Juventud de la FALGBT. La razón fue que una chica trans se estaba besando con su novio y los echaron del local con la policía. El encargado que estaba de turno el día que echaron a la pareja se hizo presentó para dar excusas y terminó agrediéndola nuevamente. Empleadas y empleados del local se solidarizaron con el reclamo de la pareja.

En noviembre un grupo de personas de todas las sexualidades se autoconvocaron en una pizzería del barrio porteño de Almagro para hacer un besazo de protesta: dos jóvenes habían sido echadas por besarse. La convocatoria se hizo a través de las redes sociales bajo la consigna "Basta de lesbofobia". Uno de los encargados pidió disculpas y repartió pizza.