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Infojus Noticias

30-8-2015|17:00|Muestra Nacionales
Una mirada al interior de la Unidad 31

Retratos con estenopeicas: cómo es la vida de mujeres en el encierro

Coordinadas por el taller “Luz en la piel” -dictado por la organización Yo No Fui-, 30 mujeres de la Unidad 31 de Ezeiza fotografiaron su cotidianidad. Ellas construyeron sus propias cámaras. En la muesta que se exhibe en la Ex ESMA, hay bebés con sus madres en las celdas, un jardín de infantes abarrotado de luz, pero también un patio con el cielo azul cruzado de alambres de púas.

  • Crédito: Facebook Centro Cultural Haroldo Conti
Por: Emiliano Gullo

Una panza está punto de explotar: parece que fuese más grande que el cuerpo que la sostiene. Detrás, siempre en la misma imagen, totalmente desenfocado, aparece un pizarrón de color verde. En la foto contigua una mujer duerme sobre una remera de bebé explayada en una cama. Ambas son parte de la muestra que continúa en las paredes de la sala del Centro Cultural Haroldo Conti, donde se exponen las miradas de 30 mujeres privadas de la libertad en la Unidad 31 del Penal de Mujeres de Ezeiza.

Coordinadas por el taller “Luz en la piel” -dictado por la organización Yo No Fui-, las mujeres fotografiaron su cotidianidad desde el 2013 hasta la mitad de 2014; siempre con cámaras estenopeicas y con formatos de 35 y 120 milímetros. El resultado se materializó en la muestra y en un libro -también encuadernado por ellas- que se presentó en el mismo centro cultural ubicado en el Espacio Memoria y Derechos Humanos (Ex Esma).

Cuando Reina entró al penal tenía una panza de seis meses de embarazo. Sus otros dos hijos lloraban su reclusión. Antes de perder su libertad había cursado algunos estudios en el Instituto Universitario Nacional de Arte (IUNA), pero nunca se imaginó que ahí adentro, cercada por rejas y paredes de concreto, iba a tener la posibilidad de relatar su vida desde el arte; más precisamente desde la fotografía. “Siempre me gustó lo artístico. Poder ver la obra terminada y mostrar a la gente lo que significa el encierro es un sueño cumplido. Creo además que es una experiencia sumamente enriquecedora porque se transformó en una foto de denuncia”, contó a Infojus Noticias Reina, que hoy tiene 30 años, recuperó su libertad y participó del lanzamiento del libro "Iluminaciones, fotografías en la cárcel de mujeres", también encuadernado por ella.

La búsqueda de la foto propia

Como el resto de sus compañeras, Reina construyó su propia cámara. Ella la hizo con una cajita de fósforos. Otras las hicieron con una caja de madera. Es que la técnica estenopeica permite convertir una simple caja en una precaria pero potente herramienta fotográfica. Las propias características estenopeicas hacen que las imágenes aparezcan con una impronta muy particular: fuera de foco, falta de definición, azarosa invasión de haces de luz, movimiento y gran ángulo de cobertura; una imagen que remite a los momentos originarios de la fotografía.

Bebés con sus madres en las celdas, un jardín de infantes abarrotado de luz, pero también un patio con el cielo azul cruzado de alambres de púas. Así aparecen 30 diapositivas sobre las escenas cotidianas de la Unidad 31, donde la mitad de la población está compuesta por madres con hijos menores de 4 años. Sólo los pueden tener con ellas hasta esa edad; luego la Justicia los entrega en custodia de las familias.

Para Reina fue un trabajo gratificante pero que se desarrolló de manera muy paulatina. “Primero sólo nos dejaban sacar fotos en el sector de Educación-dijo-, y a medida que fuimos trabajando, pidiendo los permisos, logramos movernos con tranquilidad por todos lados. Las profesoras nos guiaban, nos ayudaban, pero las decisiones siempre las tomábamos nosotras”.

El silencio y las palabras

Yo No Fui es una asociación civil que hace poco se convirtió en una cooperativa de trabajo e interviene activamente en la vida carcelaria a través de distintos talleres: periodismo, poesía, costura, encuadernación, entre otros. Pero también brinda asistencia y contención en el post carcelario. Como el servicio de asistencia psicológica al que concurre Reina, después de haber estado más de un año y medio privada de la libertad.

Desde 2008 lleva a diferentes penales el taller “Luz en la piel” con las fotógrafas Costanza Cantero y Alejandra Marín, quienes como coordinadoras ya trabajaron con más de 100 mujeres. En esta ocasión contaron con la colaboración del Centro Cultural Haroldo Conti. También tienen dos centros de formación laboral -uno en Vicente López y otro en Palermo- para las personas que intentan reinsertarse luego de pasar por la cárcel.

Todos los años exponen los trabajos que realizan las internas. En 2013 llegaron al cine con la proyección del documental "Lunas Cautivas, Historias de poetas presas". El trabajo contó con la dirección y el guión de Marcia Paradiso, donde se mostraron las historias de quienes transitaron los talleres de poesía del Penal 4 de Ezeiza y de N° 31.

“Nos interesa también el paso hacia afuera; acompañarlas, que consigan sus propios trabajo. La idea es que generen sus propios ingresos. Nosotras trabajamos mucho sobre cómo quieren reflexionar ellas mismas. Para ellas es muy fuerte que se lleven a sus hijos después de los cuatro años. Y que no les den el arresto domiciliario para que puedan cuidarlos. Todas estas críticas se ven en sus obras”, contó Marín a Infojus. Para la docente -que también curó la muestra-, estas experiencias “sirven porque les permiten pensar de una manera distinta, aparte de formarse laboralmente, y al margen de que no sigan estudiando fotografía. Ahora ven detalles, ven la luz donde antes quizá no veían nada”.

Reina está convencida de que encontró su lugar. Piensa estudiar la carrera de fotografía, mientras mejora su tarea como encuadernadora gracias a los talleres de Yo No Fui. Ramona, otra de las autoras de Iluminaciones, lo dejó escrito en una de las paredes de la muestra:

-Quise estudiar fotografía y así más o menos interpretar mi silencio porque allí hay cosas que uno nunca puede decir. Son cosas que uno tiene como dolor en el alma. El silencio cuenta más que las palabras.

Iluminaciones. Fotografía en la cárcel de mujeres se puede ver en el Centro Cultural Haroldo Conti (Espacio para la Memoria, ex ESMA) de martes a viernes de 12 a 21 y los sábados y domingos de 11 a 21. Entrada libre y gratuita. Hasta el 13 de septiembre.

JMM/EG

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